sábado, 1 de octubre de 2016

Gabriele Amorth. Fundador de Asociación Internacional de Exorcistas





 


El famoso sacerdote exorcista Gabriele Amorth falleció este viernes 16 de septiembre a las 19.50, hora local de Italia, a los 91 años. El religioso se encontraba desde hacía algunas semanas en el hospital de la Fundación Santa Lucía de Roma debido a dolencias pulmonares.

Según informa Aciprensa, la noticia de la muerte del célebre exorcista la dio a conocer la provincia Timoteo Giaccardo (Italia) a la que pertenecía el sacerdote de la Sociedad de San Pablo, fundada por el padre Santiago Alberione en 1914.

El padre Amorth nació el 1 de mayo de 1925. Fue ordenado sacerdote en enero de 1951. Su tarea como exorcista la inició en 1985 cuando fue nombrado para esa misión. Tenía en su haber decenas de miles de exorcismos.

El padre Amorth fundó la Asociación Internacional de Exorcistas en 1990 y fue su presidente hasta que se retiró a los 75 años en el 2000.

El padre Amorth, señala una nota del Grupo Editorial San Pablo, tuvo a su cargo numerosas funciones en la Sociedad sacerdotal a la que perteneció, entre las que destacan la labor de formador de los jóvenes aspirantes y religiosos, delegado de la Provincia de Italia, animador espiritual de varias instituciones laicales paulinas. También fue periodista.
Durante muchos años dirigió el boletín mensual Madre de Dios y colaboró con las publicaciones italianas Famiglia Cristiana, Credere y Telenova, y con Radio María.
El Superior General de la Sociedad San Pablo, padre Valdir José de Castro, recuerda al padre Amorth con “inmenso afecto y gratitud”.


En 2011, el escritor José María Zavala entrevistó a fondo al padre Gabriele Amorth para su bestseller sobre los exorcistas, Así se vence al demonio.

Entre las publicaciones del famoso sacerdote están Narraciones de un exorcista (1993), Un exorcista cuenta su historia (1999), Evangelio de María: Un mes con la madre del Dios (2000), Un exorcista: Más historias (2002), Exorcismo y psiquiatría (2002), y Memorias de un exorcista, una entrevista realizada por el vaticanista italiano Marco Tosatti, publicada en 2010.

El padre Amorth también dedicó un libro al Santo Padre Pío de Pietrelcina, el sacerdote que tuvo los estigmas de Cristo y cuya fiesta se celebra el 23 de septiembre, titulado Padre Pío: Historia de la vida de un santo.








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miércoles, 21 de septiembre de 2016

Sabes que no soy buena .Amy Winehouse


Amy Winehouse para Prisma Gótico, espero que os guste.


Letra en español


You know I'm no good.



Me encontré contigo abajo en el bar, y herido
te subiste las mangas de tu camiseta con la calavera.
Dijiste: ¿qué hiciste con él hoy?
y me olfateaste como si fuera Tanqueray.
Porque tú eres mi compañero, mi chico,
acércame tu Stella (marca de cerveza) y volemos.
 
Para cuando estoy fuera,
tumbas hombres (a puñetazos) como Roger Moore.
Yo misma fui la que engañó,
como sabía que haría.
 
Te dije que yo era un problema (que daba problemas),
sabes que no soy buena.

En la parte de arriba, en la cama con mi ex novio,
hace lo que debe, pero no puedo disfrutar,
pensando en ti en la última agonía,
es entonces cuando suena el timbre.
Corriendo para encontrarme contigo, patatas y pan,
dijiste cuándo nos casamos,
porque no eres un amargado.
No habrá nunca más otro,
y lloro por tí en el suelo de la cocina.
Yo misma fui la que engañó,
como sabía que haría.
 
Te dije que yo era un problema,
sabes que no soy buena.

Dulce reencuentro, Jamaica y España,
estábamos otra vez como estábamos antes,
estoy en la bañera y tú en la butaca,
lamo tus labios mientras jabono mis pies.
Entonces me notas un pequeño chupeton 
 mi estómago se cae y mis tripas se revuelven,
tú te encoges de hombros, y eso es lo peor
¿quién fue realmente el primero en dar la puñalada?
Yo misma fui la que engañó,
como sabía que haría.
 
Te dije que yo era un problema,
sabes que no soy buena.
(bis)


Sabes que no soy buena -Amy Winehouse.



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sábado, 17 de septiembre de 2016

Cajal y el eclipse revelador de 1860.


Santiago Ramón y Cajal nació en Petilla de Aragón, el 1 de mayo de 1852 y contaba, por tanto, con apenas ocho años de edad cuando pudo contemplar un fenómeno que le marcó para siempre y, quién sabe, muy posiblemente despertara en él el ímpetu por el descubrimiento que le acompañó el resto de su vida. 

Se trataba de un eclipse total de Sol. Como nos recuerda Alejandro Polanco Masa en el número 135 de Historia de Iberia Vieja, el  18 de julio de 1860 estaba previsto que el norte de España fuera el área de totalidad del eclipse, esto es, la franja de sombra óptima para observar el fenómeno astronómico.

La fotografía, o más correctamente el daguerrotipo, era un invento relativamente reciente y la posibilidad de obtener imágenes del eclipse animó a muchos científicos a viajar a España. Uno de aquellos astrónomos fue Warren de la Rue, que eligió cierto paraje de Álava para realizar su observación.  

El padre del futuro premio Nobel era un apasionado de la astronomía y, acercándose la fecha del gran evento, dado que por entonces la familia de Cajal vivía en Huesca, relativamente cerca de donde de la Rue había instalado su campamento, decidió acudir a contemplar el eclipse.

Junto al asombro general del gentío, asistió Ramón y Cajal con su padre al espectáculo natural: “El eclipse de Sol del año sesenta había sido anunciado por los diarios y fue esperado por la gente con gran impaciencia. Muchas personas, protegiendo los ojos con cristales ahumados, se precipitaron hacia colinas donde podían observar el espectáculo con comodidad. Mi padre me había explicado la teoría de los eclipses y yo lo había entendido bastante bien”. Y el hombre que cambió la historia de la medicina confiesa: 

“Llegó la hora anunciada y los cálculos se cumplieron con exactitud. Para mí, el eclipse del sesenta fue toda una revelación. Comprendí que el hombre tiene en la ciencia un instrumento poderoso de previsión y dominio.”



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